jueves, 30 de abril de 2020

Cámara frontal

El domingo pasado llamé a mi madre para hacer una de nuestras videoconferencias wasaperas cuarenteniles con ella y mi padre. Cuando contestó yo le pude ver a ella en la pantalla, pero... "Oh, no! Es cierto" -recordé. Mi cámara frontal no funcionaba, me había dado cuenta cuando en mi sesion de vitamina D de esa mañana me había intentado hacer un selfi y no había podido; se veía la pantalla en negro. Eso mismo me estaba pasando; yo les veía a ellos -ya se había unido mi padre- pero en el recuadro pequeño de la esquina donde tendría que haber estado yo, solo había un rectángulo negro.

Mi primer pensamiento fue: Bueno, pues hacemos una llamada telefónica normal, o les veo yo a ellos aunque ellos no me vean. Pero me di cuenta entonces de lo importante que era en realidad poder vernos, la gran diferencia que suponía en la calidad de esa comunicación. Le di al icono de la cámara, por hacer algo, y la cámara cambió a la trasera. Mis padres "¡Ay mira, ya se ve...!" "No, pero es la delantera, y si la pongo para que me veáis, yo no os puedo ver... A no ser que..." Y recordé el método antiguo para hacerse uno selfis: el espejo.

Así que me cogí una silla y me senté delante del espejo de mi habitación, sujetando el móvil hacia delante. Era un poco precario, pero era un apaño. Así estuvimos toda la conversación, aguantando el tirón.

Nada más acabar me metí en internet para ver cómo lo podía arreglar, aunque me temía que la cámara estaría rota. Y tras unas horas probando todas las soluciones que leí en la red, llegué a la conclusión de que era un problema de hardware y de que ya me podía ir despidiendo de tener cámara frontal. Y de repente, no sé cómo, llegué a un vídeo de youtube (de 2015, por cierto) en el que un tío, español, con el mismo modelo de Samsung que el mío, abría el móvil para cambiarle la cámara. Todo parecía relativamente sencillo, y decía que había comprado la cámara muy baratita en ebay "¿Muy baratita cuánto es?" Me pregunté yo. En seguida me contestó "...tres euros" ¿Cómorrr? ¡Allá que voy!" Y vini, vidi, vinci; me metí en ebay, la encontré, la pedí...

Total, que me salto todo hasta hoy; he abierto el buzón y ahí estaba el sobre con mi cámara nueva. Me he puesto el vídeo, he seguido las instrucciones impecablemente... ¡Y tengo cámara frontal en mi móvil! No sé cuánto me durará el móvil en sí, porque ya estaba obsoleto cuando me llegó hace tres años, pero mientras me dure podré hacerme selfis y hacer videollamadas.
Cámara nueva
Destripar,
Extraer
Corroborar y sustituir

.
Regodearse

No hay comentarios:

Publicar un comentario