Hace poco más de un mes me uní a google+ por sugerencia de Paul. En realidad no era lo que andaba buscando, pero mereció la pena la equivocación, porque me encontré con una fantástica sorpresa; google+ me recopiló en carpetitas todas las fotos que he subido a Internet desde que tengo gmail -incluida una carpeta con fotos de cinco años de posts de mi anterior blog, dispuestas ante mis ojos en un collage de recuerdos.
Fui mirando una por una las casi novecientas imágenes, deteniéndome en cada una apenas un segundo, que abarcaba todo lo relacionado con cada foto; el post que había escrito y la vivencia que me había hecho escribirlo, cómo estaba yo... Fue una experiencia muy interesante, muy curiosa y muy bonita.
Al acostarme esa noche pensé que solo por eso mola tener un blog; poder con el tiempo volver a él y recordar todo tan "desde dentro", y la sensación de "joo, me acuerdo de estoo..." con la sonrisa puesta mientras me paseo por los relatos de mi pasado ya casi olvidados contados en primera persona. Hasta las cosas más cotidianas se convierten con el tiempo en nostalgia. Entonces me acordé de unos versos de Mario Benedetti,
De vez en cuando
es bueno
ser consciente
de que hoy,
de que ahora,
estamos fabricando
las nostalgias
que descongelarán
algún futuro
Y ese fue el empujoncito final que necesitaba para decidirme a abrir mi nuevo blog; ya tenía nombre.
