lunes, 18 de agosto de 2014

Rescatada del olvido

Estábamos Montse, Carlos y yo perrunos totales tirados en el salón de Casa María, en Lagos, Algarve. No estábamos haciendo nada; charleta y poco más. En un breve silencio que hubo, Montse dijo en voz baja, como hablando para sí misma: "Me quería pintar las uñas... pero tampoco me voy a estresar" "Ya te vale tía, menudo estrés pintarte las uñas con todo lo que tienes entre manos, ¿no? -comenté yo descojonada.  


Mientras teníamos uno de esos momentos de carcajadas a tres bandas busqué con la mirada mi "cuadernito de bolso" para apuntar la frase para mi "Fábrica" "Esa frase tengo que rescatarla yo del olvido, ¿dónde está mi cuadernito? " Entonces recordé que lo tenía en el piso de arriba: "Buf, perezón, paso de subir. Vaya, parece que después de todo se perderá " Ese era el nivel de actividad que teníamos.

Mon alargó el brazo y me pasó un cuaderno que había en la casa y un boli, "escríbelo ahí y luego lo pasas a tu cuaderno" y ahí quedó rescatada. 

Pero de hecho nunca llegué a pasarla a mi cuaderno. Hoy, ya en Madrid, me ha llegado un wassap desde Lagos de Carlos, con la foto del cuaderno, rescatando la frase por segunda vez.


Después de escapar del vacío del olvido por dos veces pensé que no sería justo que yo no diera el paso final y publicara este post para rescatarla definitivamente, así que ahí está, ea, la primera "Rescatada" de mi Fábrica.

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